Cuestión de interés. ¿Por qué se mueven las nubes?

Realmente, cuando pensamos que la imaginación y la creatividad han tocado techo, nos percatamos que las familias tienen un amplio margen para la sorpresa y continuar creciendo en esta dirección.

La familia de Ana Vargas se enfrentaban a un importante reto al contestar a esta cuestión. No solo en cuanto a la selección de contenidos tanto teóricos como prácticos, sino en el montaje que consiguiera motivar a vuestros/as hijos/as y lo dispusiesen a tener una actitud de apertura hacia los mismos.

Pues bien, el stand que montaron fue una auténtica maravilla, donde podíamos apreciar claramente la esencia de la preguntan que formularon los/as niños/as, con efectos espectaculares y donde se respiraba un ambiente de paz!!

En él se apreciaban los distintos tipos de nubes y en el que podíamos comprobar la mobilidad de las mismas.

El efecto de la niebla.

Y el del relámpago.

 Aves que utilizan al viento para desplazarse.

Díptico de  las formas de las nubes.

En la puerta, el efecto del viento y los objetos y medios de transportes que se sirven de él.

Nada más llegar, como es habitual, comenzaron con la asamblea para comprobar los conocimientos que poseen sobre la cuestión.

 Empezaron explicando qué es una nube y cómo se forman.

A continuación, aproximaron el concepto del viento y especificaron los distintos tipos de nubes más frecuentes.

 ¿Es necesario que haya nubes para que llueva? ¿Todas las nubes son potencialmente lluviosas?

¿Por qué tienen diferentes colores y qué hay por encima de ellas?

 ¿Qué necesidades cubrimos con la lluvia?

Para finalizar esta parte teórica, la mamá de Ana nos contó el cuento "La gran nube"de Eva María Rodríguez, que fomenta los valores del esfuerzo, trabajo, ayuda, autoconfianza y amistad.

Después de las actividades higiénicas nos dispusimos a desayunar.

Cuando volvimos del recreo y después de un breve descanso, empezamos con la fase práctica, en la que realizamos distintos tipos de nubes. Con un material parecido al relleno de cojnes fueron las fueron configurando en distintos colores: de las que amenazaba lluvia y de las que no.

La siguiente actividad, consistía en realizar un experimento en el que podíamos ver el efecto de la lluvia. Para ello necesitaron un recipiente lleno de agua. En la superficie incluyeron espuma de afeitar con la idea de simular a la nube.

Luego con una jeringuilla cargada de colorante, fueron aplicándolo en la parte superior de donde habían puesto la espuma de afeitar.

Conforme pasaba un espacio corto de tiempo, se podía comprobar claramente el efecto que perseguían.

Finalmente, varios voluntarios/as, se prestaron a realizar la experiencia.

Una vez más, las palabras de agradecimiento se me quedan cortas, para ser justo ante tanta dedicación, trabajo  e imaginación.

La cuestión, como otras tantas, no era sencillo responderla, adaptándola a la forma de pensar en estas edades, consiguiendo la motivación ante el aprendizaje y logrando la comprensión de los contenidos.

En estas edades les encanta experimentar y visualizar lo que van aprendiendo. Aún más, cuando lo que están comprobando está muy lejano de sus experiencias cotidianas, aplicando el principio de intuición.

Por todo ello, quiero manifestar a la familia de Ana Vargas mi más sincero agradecimiento por todo lo que nos han hecho vivir en esta jornada. Experiencias inolvidables que durante muchísimo tiempo guardaremos en nuestra memoria.

MUCHAS GRACIAS!!!